jueves, 24 de septiembre de 2009

Martes Santo del 2010

Cada vez que se aproxima un proceso electoral en una Hermandad, gran parte de la atención (y del debate) se centra en las propuestas de los candidatos en relación con la salida en Estación de Penitencia de la Cofradía. Soy consciente de ello y de que nuestra Hermandad no es una excepción al respecto. Pero precisamente por ello soy consciente también de que las propuestas que voy a recoger a continuación pueden "decepcionar" a algunos, ya que no van a suponer ningún cambio sustancial. Porque cuando algo funciona, debe tocarse lo menos posible. Y creo que nuestra Estación de Penitencia es ejemplar en muchos aspectos y, por tanto, no requiere de grandes cambios: los problemas de nuestra Hermandad y las necesidades de cambio creo que están más en nuestra vida interna (Acción Social, Formación, los niños, participación de los hermanos, etc.) que en la salida procesional del Martes Santo. Eso no quiere decir que no haya algunos aspectos en los que creo que hay cierto margen de mejora y en ellos voy a centrar mis propuestas.

¿Qué quiere decir esto? En primer lugar, y por si aun no ha quedado claro, si soy elegido Hermano Mayor el próximo Mes de Noviembre, me comprometo públicamente a mantener tanto a los capataces como a las bandas de los dos pasos, en las misma condiciones que hasta ahora. Además, en el caso de las bandas, y dado que éstas desempeñan un trabajo "profesional" (y, por tanto, no sería razonable mantenerles en la incertidumbre), me comprometo también a firmarles por escrito un pre-contrato, si así me lo pidieran, en el que constara este compromiso de contratación en caso de ser elegido.

Tampoco modificaremos ningún otro de los aspectos sustanciales de la Cofradía, aunque vamos a estudiar un posible cambio de itinerario tanto a la ida (a través de Jesús del Gran Poder, pensando sobre todo en la comodidad de los niños y en la de los costaleros, para los que el trayecto actual de ida hasta la Gavidia es especialmente incómodo) como a la vuelta (a través de la Gavidia y Cardenal Spínola, como hacía la Hermandad antiguamente, recuperando un itinerario de mayor belleza que el actual a través de Jesús del Gran Poder). Habrá que analizar, conjuntamente con los capataces, como afectaría este cambio a los horarios y al ritmo de la cofradía (ya que en ningún caso se pretende prolongar el tiempo de permanencia de la Cofradía en la calle ni retrasar aun más la hora de entrada), y, en caso de estimarse que es más adecuado, se propondría para su votación al Cabildo General de Salida de Cofradía.

Otro aspecto a mejorar es el de la organización de los tramos de niños dentro de la Cofradía. Como ya dije hace un par de semanas, quiero que los niños, los grandes "olvidados" de la Hermandad, sean una prioridad durante mi mandato. Por eso, volverán a la Parroquia, para que puedan vivir la organización de la Cofradía y utilizaremos las instalaciones de la Casa-Hermandad del Gran Poder e incluso de la nuestra para la organización de los tramos de hermanos de mayor antigüedad. También, y dado el gran número de niños que ya realizan la Estación de Penitencia (más de 200), se abrirá la posibilidad de que aquellos que lo deseen realicen su Estación de Penitencia en los tramos que preceden al Paso de Nuestro Padre Jesús ante Anás.

Finalmente, una reflexión sobre nuestra Estación de Penitencia del Martes Santo no puede terminar sin hacer mención a nuestros horarios actuales, especialmente el de entrada, consecuencia de la posición que ocupamos en el día. Por desgracia, este es un asunto que no depende única y exclusivamente de nosotros, y por tanto, cualquier afirmación o compromiso en este sentido sería engañar a los hermanos. No hay más que ver que los 3 últimos Hermanos Mayores han intentado una mejora en este sentido y ninguno de ellos ha tenido éxito. Sin embargo, eso no quiere decir que vayamos a rendirnos. Es cierto que nuestra Hermandad se encuentra en una posición negociadora complicada (ya que poco tenemos que ofrecer al resto de Hermandades del día, cuyas preocupaciones son otras, léase Alfalfa, C/Águilas, etc) pero precisamente por ello debemos mantener una postura firme al respecto. Lo que yo pongo a disposición de los hermanos de La Bofetá es mi experiencia profesional como negociador en otros ámbitos, experiencia que creo (y deseo) puede ser de utilidad en una situación como ésta.

No quiero terminar sin recordar que llevo más de 35 años, desde el año 73, acompañando prácticamente sin interrupción a nuestros Sagrados Titulares: de naveta, con varita, con cirio "avanzando" poco a poco hasta llegar (y permanecer muchos años) en el 6º tramo de Virgen, de diputado de este mismo 6º tramo, con vara y en los últimos años de manigueta. E, independientemente de lo que ocurra en Noviembre, mientras la Virgen me de fuerzas seguiré haciéndolo.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

El Santo Cristo del Mayor Dolor

Recientemente hemos recibido en nuestras casas una Convocatoria de Cabildo General para el próximo 19 de Octubre, en la que, entre otros puntos del Orden del Día, se va a presentar una propuesta de restauración del Santo Cristo del Mayor Dolor en el IAPH. No voy a dar una opinión ahora sobre esta propuesta, porque es justo dejar que el actual Hermano Mayor presente y argumente la misma en dicho Cabildo. Pero sí que ha dado pie a que muchos hermanos me pregunten por mi opinión y mis planes respecto a la salida procesional del más antiguo de nuestros titulares.

En primer lugar, y ante todo, creo que es justo reconocer el mérito del actual Hermano Mayor, Manolo Paz, en poner encima de la mesa un debate antiguo en la Hermandad. Todos aquellos que hemos vivido la Hermandad desde la cuna hemos oído alguna vez a nuestros mayores hablar del tema y siempre ha sido una ilusión compartida por muchos, aunque siempre se quedaba en eso, en conversaciones en la Plaza, en artículos en el Boletín, en diseños en un papel… Y de repente se plantea si el año que viene todo ello podría ser realidad, aunque finalmente (creo que con sensatez) no se llevó a cabo.

Pero, como digo, el debate está en la mesa. Por eso, creo que hay que actuar con sensatez, como decía antes, con reflexión y con sentido de la realidad. Es cierto que nuestras Reglas recogen que todos nuestros titulares harán Estación de Penitencia a la S.I.Catedral, pero no es menos cierto que podría considerarse que ese mandato se cumple, por ejemplo, con la insignia dedicada al mismo desde hace muchos años. En consecuencia, si resulto elegido el próximo mes de Noviembre, mi compromiso es la creación de una Comisión que deberá presentar, antes de la finalización de mi mandato, un proyecto a los hermanos para su debate y aprobación en Cabildo General. Dicho proyecto recogerá en detalle todos los aspectos relacionados con la salida procesional (que son muchos y, en algunos casos complejos), tales como:

  • Al menos 3 diseños para el paso (ya está aprobado en Cabildo General que se nuevo y dorado, pero aun así caben muchas alternativas)
  • Acompañamiento musical (Sí o no, y en caso afirmativo, de que tipo)
  • Insignias que será necesario acometer (Ciriales, Bocinas, Varas, etc.)
  • Proyecto económico (que debe recoger no sólo el coste de ejecución del paso y de las insignias sino también como afecta al coste anual de la Salida procesional)
  • Fórmulas de financiación (teniendo en cuenta las posibilidades de la Hermandad y sus prioridades en el momento de la presentación del proyecto)
  • Como afectaría la inclusión de un tercer paso a nuestros horarios
  • Opinión de la Autoridad Eclesiástica al respecto
  • Negociaciones con el Consejo General de Cofradías y con el resto de Hermandades del Martes Santo, en caso de que suponga modificaciones en horario y/o itinerario

Es posible que incluso haya algún tema más que me haya dejado en el candelero, pero como veis, la cuestión no se reduce a si se hace un paso o no y cuanto cuesta, sino que es más compleja. Por eso, y a fin de que el proyecto sea lo más completo y lo más detallado posible, en dicha Comisión (formada única y exclusivamente por hermanos, obviamente) participarán ex-Hermanos Mayores, expertos en Arte y en Historia, expertos económicos, ex-Diputados Mayores de Gobierno y expertos económicos. Y siempre teniendo muy claro que la opinión final la tendrán los hermanos, que serán quienes decidirán si se realiza y, en caso afirmativo, cuando y como efectuará la salida procesional del Santo Cristo del Mayor Dolor.

Por último, os adjunto un artículo publicado en el Boletín de la Hermandad en el año 2001. Muchos no lo recordarán, otros quizás sí, pero es indudable, como decía antes, que estamos hablando de una ilusión "dormida" durante mucho tiempo y que merece al menos la oportunidad de que todos los hermanos opinen.


 

LÁGRIMAS Y ABRAZOS

por Malco

    Martes Santo, de no importa qué año. 8 y cuarto de la tarde. Las puertas de San Lorenzo se abren lentamente y, fiel a su cita anual, la Cruz de Guía de la Hermandad del Dulce Nombre avanza lentamente por la Plaza. Murmullos. El canto de algún pájaro. Luz de atardecer de Primavera (¡en Sevilla!) y algún rayo de sol que se cuela por la cúpula arbórea que se forma cada mes de Abril. La Cruz de Guía llega a la esquina y se pierde por Cardenal Spínola. No cabe un alfiler en la Plaza. Detrás de ella, el Senatus y los hermanos de la Bofetá, serios pero alegres. A través del antifaz, sus ojos reflejan la alegría y la responsabilidad que sienten, conscientes del momento histórico que están viviendo. Ya se atisban ciriales y el humo del incienso. Los murmullos aumentan cuando salen a la Plaza. En la Iglesia, se oye un golpe de martillo, seco, rotundo. Y otro. Y un tercero. Los murmullos se van apagando hasta que el único sonido que se oye es el rachear de los pasos de los costaleros. Ya está en la puerta. Silencio. Y de nuevo el martillo. Uno, dos, tres. La voz del capataz apenas se escucha, mientras susurra: "Vámonos de frente, muy poquito a poco". Ya sale. Ya está fuera. La banda rompe a tocar la Marcha Real. Las manos echan humo. Es la ovación más grande en años en San Lorenzo. En la Iglesia, algún abrazo, y sobre todo lágrimas, furtivas debajo de los antifaces. Después, de nuevo el silencio. Murmullos, ahora de admiración. Algún codazo por debajo ("¿has visto la canastilla de caoba?", "¿y qué me dices de los hachones?"...). Y los hermanos penitentes que siguen al paso, pero sienten que este año el peso de la cruz apenas se siente, que Él les ayuda en su penitencia. Porque el Cristo del Mayor Dolor ya está en la calle y no hay penitencia más Dulce que acompañarle por las calles de Sevilla.

    El paso avanza. Ya llega a Cardenal Spínola. No se oyen más murmullos, unos atenazados por la emoción, otros sobrecogidos por la imagen del crucificado, recortada sobre el Cielo de San Lorenzo. Y se pierde calle abajo. Después vendrá La Gavidia, la Campana, Carrera Oficial, la estación a la Catedral y la vuelta, ya noche cerrada, entre la admiración del pueblo de Sevilla. Ya está de vuelta en la Plaza. Avanza despacio, solamente iluminado por los cuatro hachones en sus esquinas. Parece como que no quiere entrar. Nadie quiere que termine su primera Estación de Penitencia. Suenan las Saetas y, lentamente, el Cristo del Mayor Dolor entra en la Parroquia, donde de nuevo se repiten lágrimas y abrazos.....

    En ese momento, algo sonó que le despertó. Miró a su reloj y vio que era la hora. Había que levantarse y arreglarse. Era Martes Santo y sus Benditos Titulares, Nuestro Padre Jesús ante Anás y María Santísima del Dulce Nombre le estaban esperando en sus pasos de salida para la misa preparatoria de la Estación de Penitencia. Llegó a San Lorenzo, y antes de ocupar su sitio en los bancos delante de los pasos, entró en la capilla y en silencio, como cada año, oró ante el Cristo del Mayor Dolor. Sólo había sido un sueño. pero un sueño hermoso. Oró por su familia, su mujer, sus padres, sus hijos. También oró por sus amigos, familiares, compañeros... Oró por la Hermandad y pidió que las injusticias de este mundo terminen algún día. Oró por los que estaban ya gozando de Su presencia. Y oró porque algún día, el sueño se haga realidad....

viernes, 11 de septiembre de 2009

Semilla del futuro…y del presente

No sé si los que asististeis ayer al primer día del Triduo (por cierto, con una asistencia de herman@s más bien pobre, lo que en mi opinión es una muestra de la necesidad que tenemos de "revitalizar" la Hermandad) pudisteis oírlo. Pero hasta bien avanzada la Misa se podían oír de fondo los gritos de los niños jugando en la Plaza de San Lorenzo. Es probable que muchos de esos niños no fueran hermanos, pero sí que la situación es una buena metáfora de lo que ocurre en nuestra Hermandad: la Hermandad "dentro" y los niños "fuera". Porque si nos paramos a pensar, ¿Cuántas de las actividades que realizamos a lo largo del año están pensadas en ellos? La ofrenda floral, el cartero real y, ahora, la fiesta durante el Besamanos y…. se acabó. Y sin embargo se nos llena la boca hablado de ellos, diciendo que son la semilla del futuro que debemos cuidar, el porvenir de la Hermandad.

Por ello, me gustaría, si los Hermanos depositan su confianza en mí, dedicarles una atención especial. Para ello, pretendo crear, en el ámbito de la Junta Auxiliar, una Diputación especial para ellos. Creo que el concepto de "Grupo Joven" actual es demasiado amplio (desde los 0 años hasta los veintipico), y que no tienen nada que ver los intereses de un chico/chica de 14 años, con los de uno/a de 8 o de 3. Esta nueva Diputación trabajará para poner en marcha un Programa de Actividades para los más pequeños, agrupando las mismas en dos grandes grupos:

  • Actividades para niños que aun no hayan realizado la Primera Comunión: estamos hablando de los más pequeños, de aquellos que por edad, no asisten a los Cultos (básicamente, porque se aburren), pero para los que me gustaría que la Hermandad fuera un lugar donde ir, donde divertirse, donde hacer amigos..., en definitiva, un lugar donde les resulte atractivo venir. También pondremos en marcha actividades en paralelo a los principales Cultos de la Hermandad, que además faciliten la asistencia a los mismos de los padres.


  • Actividades para niños una vez realizada la Primera Comunión: aquí estamos pensando en trabajar conjuntamente con la Diputación de Cultos para poder realizar alguna actividad que permita la participación activa de los niños en los mismos (por ejemplo, organizar Misas de Hermandad orientadas a ellos, como hacen ya algunas Hermandades del barrio, u organizar actividades formativas orientadas a ellos).

Evidentemente, para poner en marcha estas actividades espero que podamos contar con las ideas y las ayudas de los padres, que son quienes mejor conocen a sus hijos. Y con todo ello, la integración en el Grupo Joven de la Hermandad, cuando llegue el momento, será más fácil, natural y menos dependiente de que "Papá y Mamá vayan a la Hermandad".

Y una última cosa: espero que el próximo Martes Santo, nuestros niños puedan volver a contemplar la salida de la Cofradía desde el interior de San Lorenzo. Sé que es difícil, pero seguro que con las ideas y la colaboración de todos, encontramos la manera.


jueves, 3 de septiembre de 2009

La Fundación Virgen del Dulce Nombre

Me gustaría dedicar esta nueva entrada en el Blog a comentaros mi visión y mi propuesta para la Acción Social en nuestra Hermandad. Y ello me obliga a ser crítico, o mejor dicho autocrítico, con la labor de Acción Social que hemos venido desarrollando en los últimos años. Porque creo que nos hemos equivocado. Y digo "hemos" porque de una u otra manera he estado vinculado a la Junta de Gobierno en 9 de estos últimos 15 años, y por ello he sido partícipe de los errores. Vaya por delante que esta afirmación pretende ser una crítica para esos (pocos, me temo) hermanos que durante estos años han apoyado y desarrollado nuestra Acción Social: el Economato, la acogida de los niños bielorrusos, la participación en el proyecto de Guardería en Los Pajaritos o la colaboración con el Proyecto Al Alba deben consolidarse en el seno de nuestra Hermandad y por mi parte encontrarán el mismo apoyo que han tenido con el actual Hermano Mayor.

Y sin embargo, creo que no es suficiente. En los discursos "oficiales" se nos llena la boca de decir que los pilares de una Hermandad son el Culto, la Formación y la Acción Social, pero a la hora de la verdad, nos preocupamos y participamos muchos de lo primero y nos olvidamos y dejamos en manos de un reducido grupo lo demás. ¿Por qué? Cada uno tendrá su opinión y su teoría, pero la mía es que cuando las Hermandades intentan "jugar" a lo que no son, encuentran poco eco entre sus "bases" (o sea, sus hermanos). Las Hermandades y Cofradías, al menos en Sevilla, nacen con la intención de dar testimonio público de Fe. Es cierto que algunas de ellas posteriormente incorporan a sus fines otros (como la asistencia a ancianos, huérfanos o viudas), pero el fin principal reside en este Culto público, y éste sigue siendo el motivo principal de pertenencia a la misma para muchos hermanos. Si a esto añadimos la proliferación de ONGs (de signo religioso o no) que realizan estas labores asistenciales y que, en muchos casos, es el propio Estado el que asume estas labores, todo ello nos lleva a que sean una minoría aquellos cristianos que deciden canalizar su compromiso y su labor de caridad a través de su Hermandad.

Y sin embargo, es nuestra obligación como asociación de fieles el impulsar esta labor. Aquí es donde creo que se ha encontrado nuestro "error": porque en lugar de "competir" con otras instituciones (como Cáritas o las ONG que antes mencionaba) ya existentes en el seno de la Iglesia Católica o con el propio Estado, que en gran medida es lo que hemos venido haciendo, las Hermandades y Cofradías debemos buscar la manera de "completar" a éstas. Creo que si algo tenemos las Hermandades, gracias a ese Culto público que realizamos y fomentamos, es notoriedad en nuestra sociedad y capacidad de movilización. Y debemos ser capaces de usar esa capacidad para liderar proyectos de Acción Social que superen el ámbito de la propia Hermandad.

Por ello, una de mis propuestas (y de mis "ilusiones" como digo en el título de este Blog) es que la Hermandad lidere la creación de una Fundación con fines sociales: la Fundación Virgen del Dulce Nombre. Dicha Fundación nacerá con un fin muy concreto y estrechamente ligado a los orígenes de nuestra Hermandad: LA PROTECCIÓN DE MENORES Y LA INTERVENCIÓN, COMO ENTIDAD MEDIADORA, EN PROCESOS DE ADOPCIÓN INTERNACIONAL. Todos sabemos que uno de los fines fundacionales de la Hermandad fue el de atender, amparar y socorrer tanto a niños como niñas huérfanas, desamparadas y abandonadas de la ciudad de Sevilla. Y los huérfanos del siglo XXI ya no se encuentran en nuestro país (o, mejor dicho, sus necesidades y su tutela son cubiertas por el Estado), sino más allá de nuestra fronteras. Y son las adopciones internacionales las que permiten materializar esa atención y ese amparo a los huérfanos, garantizando el derecho que todo niño tiene a desarrollarse en un ambiente familiar normal. Además, una Fundación con este objetivo complementaría y reforzaría los actuales proyectos de Acción Social que antes mencionaba (niños bielorrusos, Guardería Los Pajaritos, etc.).

Pero es evidente que una Hermandad como la nuestra no puede por sí sola soportar un proyecto de esta envergadura. Por eso decía que nuestra misión debe ser la de liderar el mismo, pero buscando socios adecuados para este proyecto. Así, nuestra Hermandad no estará sola en este proyecto, sino que la Fundación se promoverá junto a otras entidades civiles (Colegios Profesionales, Entidades Financieras, Organismos Públicos…).

Me dejo más detalles del proyecto "en el tintero", pero si alguno tiene interés, me tenéis a vuestra disposición para profundizar en el mismo. Perdonad la extensión de la entrada del Blog de esta semana, pero se trata de un proyecto que realmente me ilusiona y me apasiona, y espero haber podido transmitiros siquiera un poco esta ilusión y esta pasión.